Típico recurso de la zalamería servil rola es referirse a alguien atribuyéndole una rotunda superioridad respecto a cualquier conducta cuestionable: todo el que espera un favor de un político usaría esa frase para referirse a los negocios tramposos de siempre; la cosa se reduce ante la entidad de la persona. Y siempre resulta que nadie está por encima de nada sino que esa retórica pone a salvo al de arriba. Lástima que el teclado no permita mostrar el mohín que acompaña siempre a esa frase.
Cuando un rolo de ese estilo se emborracha puede cambiar el sujeto de la oración: «Yo estoy por encima de todooo eeeeeso». Tal parece que el afán de protagonismo nubla tanto la visión como una dosis abusiva de alcohol, y es lo que le ocurre a Patton en su último comentario dedicado a proclamar su rencor por haber dejado de liderar el ranking de blogs colombianos inscritos en Blogalaxia.
El ego vs los directorios de blogs Nunca he sido fanático de los contadores de visitas, siempre me han parecido nocivos. Saberse leído es el alimento para la mayoría de las personas que tenemos un blog, así como decir que uno escribe para sí mismo y que no le importa si lo leen o no es un pajazo mental. Lo digo sin querer generalizar, seguro si hay a quienes honestamente no les interese. Pero es que una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.
Una cosa es que la motivación para escribir en un blog sea la de ser leído y otra que la motivación sea la de obtener muchas visitas. De ahí mis reservas con los contadores y los rankings, "numeritos sacapecho" como se los definí al gerente el año pasado. De ahí mis reservas con aquellos blogs que se limitan a copiar y pegar/fusilar noticias de páginas de tecnología, o similares... que de blog personal no tienen nada. Para mí son páginas de tecnología que se actualizan con frecuencia. A mi me produce desconfianza una persona que no sea capaz de escribir algo por sí misma, y que sólo pueda poner tests, memes, noticias y cadenas. De ahí mis reservas también con los que hacen posts llenos de palabras muy estratégicamente populares con google, sólo por ganar visitas.
La razón por la que no me gustan los ránkings es porque se dá un fenómeno similar al del gollum del señor de los anillos... se despierta un demonio interno (por algo la codicia es considerada pecado capital por la iglesia) que hace que se quiera competir por estar arriba sin importar cómo. Se desata una guerra sin cuartel por estar arriba, no es sino mirar lo que pasó en perublogs en sus comienzos. No conozco bien la historia, pero lo que entiendo es que se desató una guerra (que pasó de lo virtual a lo físico) entre dos portales, y entre los mismos miembros por estar arriba, que se puso muy fea: insultos, calumnias, agresiones, saboteos (como que fueron a una reunión de bloggers a sabotearla y todo), chismes ... bochornoso, digno de Laura en América. En México la situación (según me cuentan) es similar: no se hablan, no se pueden ver entre ellos, se hackean el uno al el otro, ¡¡¡organizan conferencias!!! de por Dios, ¡¡¡conferencias!!! ... es que el ego hace que haya gente que se empiece a tomar las cosas muy en serio, que jartera. Yo no quisiera ver eso aquí en Colombia jamás. Afortunadamente ni blogscolombia ni TOL han puesto un ránking de visitantes ni han caído en esa competencia idiota, supongo que precisamente previendo esa tendencia natural de la condición humana, y porque supongo que son personas sensatas e inteligentes y que entienden que hay espacio para todos. A blogscolombia no volví porque la herramienta de ping es usada impunemente por algunos que, desesperados por llamar la atención que hacen ping cada media hora. (a mi me late que hay quienes tienen un script, porque mucho desocupe hacer ping cada media hora). Se suponía que la herramienta era para mostrar los blogs recién actualizados, pero ya pocos la usan para lo que fue creada.
Eso sí, la autoironía es un arte admirable, pero cuando va acompañada de mentiras torpes el resultado es una colombianización del humor: el lector que quiera ver una mentira torpe debe tener presente lo que dice Patton en el texto citado al observar este pantallazo de Blogalaxia:
Esto está tomado al azar, y de los diez blogs que aparecen reseñados cinco no salen en el ranking. Es simple: se sale en el ranking porque se exhibe el botón de Blogalaxia, y se exhibe el botón de Blogalaxia porque se quiere tener la cuenta de las visitas, salvo que uno tenga otros contadores, como es el caso de Patton, y entonces sólo se pone el botón para salir en el ranking.
¿Y qué? ¿Cuál es el sentido de las
acciones humanas?
Ya he comentado que quienes resultan desplazados de los primeros puestos del ranking desarrollan cierto rencor, cierta ofuscación, pero es que eso tan normal y tan humano llega a extremos inquietantes en el caso de Patton. Atención a este párrafo:
Blogalaxia es un portal Peruano, en mi concepto el portal latino más grande y mejor organizado para blogs. (bueno, porque no conozco otros similares). Es un directorio con muchas utilidades, categorías, tags ... es realmente bueno. Pero por desgracia tiene ésa odiosa característica del ránking. Y si, mentiría si no admitiera que es gratificante estar en los puestos de arriba.... pero "a lo bien". Es que algunos que manifestamos hacer las cosas al derecho actuamos en consecuencia. Era cuestión de tiempo para que llegara un Colombiano de esos que se definen como emprendedores, avispados, creativos, echados pa'lante y berracos que encontrara una manera de llegar a lo más alto rápidamente y con poco esfuerzo. Para mi sorpresa fue un portal Colombiano que consideraba serio, quien abusando de la inocencia de sus suscriptores encontró una ingeniosa manera de burlarse del sistema de blogalaxia y subir sus visitas como por arte de magia. Incluyó una aplicación en flash que dentro de su código incluía la imagen de blogalaxia, con la que de ser un directorio de blogs anónimo pasó en dos semanas a ser el número 4 de toda Hispanoamérica. Lo que hacían era que toda visita a un blog que tuviera el applet contaba como si fuera una visita a la página de otros. La trampa está bien explicada aquí
El applet de actualizaciones de la blogoteca es una aplicación que desarrolló uno de los miembros del equipo y que permite mostrar las últimas actualizaciones de los blogs que escoja el usuario. Esa aplicación ha recibido felicitaciones por ejemplo de una de las más prestigiosas páginas de tecnología para blogs en español. Para nosotros ha representado algún trabajo y aun gastos implementar y difundir esa aplicación y esperábamos aumentar las visitas a nuestra página y aun ganar dinero gracias a ella (pues se considera poner publicidad comercial en lugar de una de las actualizaciones).
Es que de tanta perversidad nos empieza a resultar difícil reconocerles a los demás el sentido del humor. ¡Según Patton sólo era una estratagema para subir en el ranking! Este buen hombre es un genio. Yo dudo mucho que en muchos años vuelva a encontrar algo tan gracioso.
Noción de «ego»
Por desgracia, Patton no publicó la primera versión de su artículo, que conocimos gracias a la solidaridad de uno de los «soloclones». Ahí se hablaba de la blogoteca como «El Palacio del Ego». Lo que pasa con ese término es que su uso aparece en el diccionario como «coloquial» y se define como «exceso de autoestima». Es una definición falsa y vulgar, como la misma noción de «autoestima», introducida, al igual que «ego» en la última edición del diccionario. El exceso de amor propio se lamaba «arrogancia», «soberbia», «orgullo». A veces la noción de «ego» corresponde a las definiciones de esas palabras, pero más a menudo se trata del afán de reconocimiento. A la obsesión por el reconocimiento, no a una noción que se tiene de uno mismo sino a la búsqueda desesperada de confirmación en los demás.
No queremos ser así, no queremos cebarnos la vanidad porque sabemos que ése es un camino de perdición. Ahora bien, ¿es posible comprobar la atención obsesiva que se nos presta desde la página de freaksunidos reseñada por Patton sin empezar a tener una noción distorsionada de nuestra propia importancia? Ojalá algún lector prestara atención a ese escrito: son los mismos que menosprecian infinitamente a la gente sin estudios pero están todos los días haciendo el troll en País Bizarro, demasiado liberados de todo sentido de amor propio como para escribir algo relacionado con el tema de los posts, y pendientes sólo de mencionar a las AUC a la primera ocasión. Pero no, el hecho de merecer tanta atención sólo muestra lo diminutos que son esos campeones de la envidia, que ciertamente jamás, como el mismo Patton, desarrollarán nada que pueda resultar útil a los demás.
Lo que es no contar con la astucia de Patton
Las gráficas que reproduce Patton en su blog y que cualquiera puede encontrar aquí muestran un salto extraordinario en la frecuencia de las visitas a la blogoteca a partir de la fecha en que pusimos el applet a disposición de los blogs inscritos. Pero sobre todo dejan ver que no teníamos intención de engañar a nadie, cosa respecto de la cual publicamos ayer un post en la blogoteca y que explica más ampliamente Icarus en esta discusión, y del cual me permito copiar un párrafo:
Finalmente, quisiera aclararles a los administradores de blogalaxia, que el applet de la blogoteca es una animación de flash que se conecta a un web service nuestro. Debido a las restricciones de seguridad del sandbox de flash, no podría funcionar de no ser porque el applet corre DENTRO de una de NUESTRAS páginas. Es el mismo concepto del sandbox de los applets de java y funciona de la misma manera que funcionan los avisos de Amazon, y las cajitas de mensajes que tantos otros blogs utilizan: dentro de un iframe.
Es decir, contar las visitas a blogs que exhibieran el applet nos parecía lícito y si no tuvimos la prudencia de prever la reacción de los envidiosos es porque las estadísticas no nos parecen tan importantes. Según puede explicar Icarus, también sería posible hacerlo de modo que no se notara, pero sería la forma de obrar de quien estuviera haciendo algo ilícito. No obstante, el brillante investigador saca una conclusión definitiva:
No era sino ver las gráficas para darse cuenta que algo raro había ahí.
Pero el que veía en la blogoteca el «Palacio del Ego» se explaya un buen rato sobre sí mismo como para orientar a sus lectores acerca de cómo es él. Y tan hermosa descripción sólo es el preludio a la perla que viene al final:
Yo no escribo en mi blog para ser el primero en un ránking que diga que soy el más leído. No me interesa. Nunca ha sido mi motivación, uno hace lo suyo y el resto llega por añadidura. Me gusta saber quienes me visitan sin mirar si el pasto en la parcela de al lado es más verde -por eso nunca pondré uno visible- ni estoy compitiendo con nadie, el de TOL está detenido hace semanas allí y quisiera que fuera solo un vínculo al portal... lo conservo por simple sentido de pertenencia y ya. Que a todas estas creerse el cuento de que se es el más leído es engañarse, otro pajazo mental porque la mitad o más de las visitas que registran esos contadores son visitantes extraviados de google que llegan por casualidad y nunca vuelven. Ni leen lo que uno escribe, ¿que chiste tiene eso? Es como acostarse con una puta: no tiene gracia, que no sólo es pajazo mental sino que encima le cobran. Y por anticipado.
Yo escribo porque me divierto, porque me gusta compartir mis cosas con desconocidos y por ése ANACUPRO que llevo adentro. Me gusta que haya gente que le divierta lo que escribo, me gustan leer y responder sus comentarios ... es innegable que blogalaxia es un buen medio de promoción, pero poner los blogs en orden de visitas, como podemos ver ...es más nocivo que benéfico. El día que uno deje de escribir porque le nace y lo haga por subir sus visitas o su posición en un ránking escribiendo (poniendo palabras sobre, mejor) de temas que sabe atraerán visitas.. ese día se prostituyó. Ese día dejó de ser un blog personal para ser una página más. Para leer cadenas, memes y noticias insulsas está el e-mail.
Bueno, en la blogoteca no escribimos para aparecer en un ranking, no copiamos textos, no ponemos palabras clave para aparecer en los buscadores, pero sobre todo no hablamos de nosotros mismos. Lo de irse poniendo uno mismo de ejemplo es por lo menos una forma de faltar al respeto a los demás. Ya se ha explicado que toda la rabia de Patton es precisamente por dejar de figurar como el blog más leído en Blogalaxia, que si no quisiera aparecer en el ranking tampoco tendría el botón y que ese post es una muestra patética precisamente de lo que pretende denunciar. Pero...
El arrebato patriótico
Respecto a lo que hizo lablogoteca: Que vergüenza me da saber que es un sitio de Colombia. OK, los avergonzados deberían ser ellos, lo que me da es pena ajena saber que fueron unos Colombianos quienes hicieron trampa para beneficio propio, vaya novedad. Y encima cínica y descaradamente lo niegan y se justifican, resultando ser los de blogalaxia y los que se dieron cuenta de la descarada y vergonzosa triquiñuela los malos del paseo. Bueno, buena escuela para eso si han tenido, no es sino revisar nuestra historia política. Acepten que la embarraron y ya, es una salida mucho más digna y ciertamente menos penosa que decir, plabras más, palabras menos "no nos pareció malo hacer trampa". Por mi lado ya eliminé toda relación con ese directorio. Shame on you.
Por algo las abuelas siempre han dicho: "El que sube como palma ... cae como coco". Que sabias que son las abuelas.
Menos mal que a Patton no le importan las estadísticas, porque el arrebato moralizador que le da podría matar de la risa a más de uno: no lo avergüenzan los secuestros ni las masacres ni los que las cobran ni los que editan respuestas ajenas, cosas de las que nunca se ocupa en su blog: la patria puede lidiar con eso: ¡pero que alguien se atreva a hacer trampa con las estadísticas! Claro que los de Blogalaxia sencillamente habían dejado de mostrar los blogs cuyas estadísticas eran cuestionables y nos contestaron explicando que las sanciones ni siquiera iban dirigidas en especial contra nuestra página, que ahora mismo aparece en las estadísticas con números de visitas inalcanzables para Patton, que ciertamente en su gran mayoría corresponden a visitas efectuadas a blogs que exhiben el applet. La «trampa» que tanto le indigna no es tal, pues el applet está en una página de la blogoteca, y sobre todo no tiene más importancia que el daño que pueda hacer a la vanidad de personas capaces de prestarse a Pattochadas como ésa: verdaderos Pattanes.